El turismo de bienestar crece arrolladoramente, pero es mucho más que una moda. A través de la asociatividad, abre una oportunidad de conectar con la demanda.

El aumento de la conciencia sobre la importancia de la salud, el envejecimiento de la población mundial, la creciente demanda de experiencias auténticas y personalizadas, y el auge de las redes sociales -donde los usuarios comparten sus prácticas de bienestar con otros-, son el trampolín de una actividad que todavía tiene un largo recorrido hasta la cima.

Una industria multimillonaria

La agregación de todos los gastos en los sectores mencionados alcanzó un récord global de US$ 4,9 billones en 2019. Luego vino la pandemia y la industria del bienestar se redujo un 11% a US$ 4,4 billones en 2020.

Desde entonces la investigación del Global Wellness Institute (GWI) demuestra que se experimentó un crecimiento del 27% hasta alcanzar los US$ 5,6 billones, con 7 de los 11 sectores del bienestar superando en 2022 sus valores de 2019.

Pero lo más revelador del valor que tienen para los consumidores la prevención y el bienestar, es que la ONG prevé que ese sector de la economía crecerá a un impresionante ritmo anual del 8,6% hasta 2027, cuando el mercado alcanzará los US$ 8,5 billones, casi el doble que en 2020.

La evolución del turismo de bienestar

De hecho, el turismo de bienestar está creciendo mucho más rápido que el turismo en general. El extraordinario aumento anual del gasto del 36% y de los viajes de bienestar del 30% (de 2020 a 2022) es notablemente superior a las tasas de incremento del consumo turístico global (28,4%) y de los desplazamientos en general (23,8%).

Los viajes de bienestar representan actualmente el 7,8% del total, pero suponen un 18,7% de todos los gastos turísticos. O sea, el turismo de bienestar representa casi 1 de cada 5 dólares gastados en viajes.

Sucede que los turistas de bienestar gastan mucho más que los de ocio. Con una media de US$ 1.764 por salida, consumieron en 2022 un 41% más que el promedio. Y si comparamos las erogaciones a nivel doméstico, la diferencia es aún mayor: un 175% más que el turista nacional promedio.

Fuente https://argentina.ladevi.info/turismo-bienestar/turismo-bienestar-mucho-mas-que-experiencias-reparadoras-n63641